Don Rafael





¿Por qué el “Don”?

Surgió espontáneo. No pretendo sugerir distancias, ni diferencias que puedan entenderse dentro de un lenguaje peyorativo, todo lo contrario, el personaje aludido me sugirió humildad en todo sentido, muy alejado de tratamientos especiales. Le conocí hace unos pocos días atrás y la conversación breve, de un instante,  movió internamente mi ser pensante y he aquí algunas palabras.

Don puede sugerir respeto y esa fue la inspiración principal que me sugirió su figura. Una figura que ví desde lejos caminar pausadamente y con una chispa en los ojos. Finalmente lo ví entrar al recinto anunciando su presencia con voz queda y a la vez decidida. Saludaba a todos con una sonrisa, satisfecho de haber llegado, de encontrar el espacio acostumbrado, de dar rienda suelta a la imaginación.

En la conversación inmediata luego de su arribo, resentía de una noche de sueño alterada, un dolor de espalda se empecinó con su humanidad, dolor egoísta y ajeno a la realidad de que perturbaba el tiempo de recuperar energías para la faena del día siguiente. Un tiempo de sueño que ya se presenta corto dada su edad, porque Don Rafael tiene 83 años. Su humanidad asiste todos los sábados a un taller de creatividad, allí le conocí, en un espacio que le ofrece libertad plena a la imaginación y que dirige una mujer a la que me unen recuerdos y experiencias juveniles.

Don Rafael me miró, nos conocimos, seguidamente en actitud desprendida, llena de mucho orgullo, compartió los trabajos que ha venido desarrollando cada sábado y que guarda dentro de una carpeta de cartón azul oscuro. Allí miré moscas, abejorros, follaje y una mariposa. Don Rafael es biólogo, los libros que le acompañaban ese día demuestran mucha experiencia. Además de dibujo me habló de sueños y el más inmediato es incursionar con pasión con la técnica del óleo, supongo que ya estará estableciendo directrices para ello. Manifiesta que sus hijos, arquitectos ambos, demuestran habilidades extraordinarias para el arte del dibujo, no tenía por qué dudarlo dado el título profesional.  Con picardía señala ante el desconocimiento de su propio arte y el descubrimiento de un nuevo mundo que pretende vivir a plenitud, que ya entiende por qué ellos poseen esas hermosas competencias. ¿Tienen a quién salir? Es la interrogante obvia ante la anécdota compartida.

La mujer amiga de mi juventud abrió las puertas de su taller, no solamente descubriendo paredes de colores, herramientas, utensilios, maderas, piedras, mesones expectantes y jardines abiertos a la experiencia creativa, sino también el sentir y experiencia de vida de sus estudiantes. ¿Las beneficiarias?  dos amigas foráneas muy cercanas que se atrevieron a desafiar sus hábitos y entorno cercano, que solo pretendían mirar otra forma de hacer las cosas en un país que pareciera rendirse ante la barbarie. No es así, Venezuela resiste en muchos rostros, en el trabajo apasionado de mucha gente que siente que su labor diaria más que una profesión es una manera de vida, es una rebelión ante la imposición de lo oscuro, es resistir ante lo que pretende instituirse como indiferencia ante lo mal hecho, es enfrentar con las armas de la creatividad, el yugo de la indolencia.

Gracias Don Rafael, gracias a la mujer anfitriona, gracias a la mujer compañera… 


Comentarios

  1. Mi admirada Solange, que palabras tan sentidas, mejor expresadas imposible! Confieso que jamás imaginé que al abrir las puertas de mi Taller lograría darle a sus visitantes, bien sea para estudiar o sólo visitar, esa comunicación con la sensibilidad del alma y la vida. Noto después de estos años, que en ése espacio (mi templo, mi refugio) la sensibilidad aflora...invita a reflexionar sobre nuestra propia existencia. Tal cual me ocurre a mi, ése espacio tiene una energía cargada de tantas buenas intenciones que es inevitable que la gente no se sienta a gusto. Feliz de que todo eso ocurra por mi culpa!!!

    ResponderEliminar
  2. Licia, por tu culpa, por tu culpa, por tu gran culpa...¡sí señor! ;) Fue solo una mañana y te puedo decir que la disfruté al máximo. Cualquier espacio de creación es mágico y el tuyo no es la excepción. Siempre gracias por esto.

    ResponderEliminar
  3. Solange, estoy gratamente impresionado por sus palabras tan llenas de afecto, cariño y una gran capacidad de observación y análisis que me han dejado alagado y lleno de una gran emoción!realmente no me imagine nunca estar en un sitio donde podemos compartir tantas emociones e impresiones muy gratas del acontecer diario. Ha sido una gran experiencia para mi, a pesar de mis años.
    atte
    Don Rafael

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Don Rafael, gracias por pasar por acá y dejar su mensaje. No le había leído hasta ahora, es a usted todo mi agradecimiento por esa amena charla y testimonio de vida. Un abrazo fuerte desde acá.

      Eliminar

Publicar un comentario

Iluminando con ideas...

Entradas populares de este blog

Dar la espalda ...

Empujando una carreta de....¿sueños?

Tener la sangre dulce